Des del 7 de septiembre hasta el 31 de octubre de 2024
Conocer a Chelo Simón es descubrir no sólo al artista, sino también la profunda humanidad que la habita. Su cálida acogida, su risa contagiosa, su sencillez y su buen humor crean instantáneamente un clima de confianza.
Chelo Simón, artista visual de origen español, se ha consolidado como una figura emblemática del arte contemporáneo. Nacida en Alcoy y fuertemente arraigada a su país de origen, que abandonó prematuramente, trasciende las fronteras geográficas y artísticas. Su trabajo está marcado por una búsqueda de identidad y resiliencia.
Formada en Bellas Artes en València, la carrera de Simón es todo menos lineal. Una importante ruptura la alejó de su vocación artística, sumiendo su práctica en un período de letargo. Esta latencia, sin embargo, resultó ser una fase preparatoria para un renacimiento creativo.
Esta renovación artística comenzó en el taller de Dominique Bonnet Moreau, quien animó a Chelo a «desaprender», a deconstruir sus prejuicios artísticos, a abrazar la incertidumbre y a reinventar su relación con la creación. Porteriormente, la intervención del artista FX Combes marcó una nueva etapa en la evolución de Chelo. Su sugerencia de trabajar en series, con procesos repetitivos donde la repetición se convierte en un acto de diferenciación creativa, inicialmente percibida como absurda, resultó ser un poderoso catalizador para la transformación.
Hoy, en su taller, un verdadero microcosmos de creatividad, Chelo Simón dialoga con el yute, un material crudo, resistente y restrictivo que produce una lucha intensa y sensorial entre el arte y el artista, entre el artista y el material fibroso. De este combate frontal y brutal nace una fuerza única. Además, las obras de Chelo, ensambladas sin clavos, tornillos ni pegamento, se mantienen unidas por «La fuerza de los vínculos», una expresión que evoca nociones de solidaridad e interconexión humana:
“Mi trabajo busca representar una restricción que sea a la vez creativa y liberadora. Representa mi caos, fuente de dificultades y resistencias. Debemos ser capaces de aceptar la destrucción, el desorden que perturba para luego poder acoger las consecuencias del caos: constructores y portadores de un aliento innovador”
Chelo Navarro Simón
La artista apuesta por las materias primas y una paleta de tonos marrones, grises y rojos, colores que simbolizan la tierra y la sangre y que evocan la vida y la lucha. Sin embargo, no impone restricciones cromáticas, demostrando una apertura a lo inesperado y a la diversidad de las experiencias humanas. Encarna, a través de su carrera y su práctica, una visión del arte como una exploración continua de uno mismo y de la materia. Sus obras son una manifestación tangible de la lucha entre orden y caos, artista y material, que conduce a una creación auténtica y resiliente. En definitiva, Chelo Simón no sólo produce arte, ofrece un discurso profundo sobre la condición humana y el poder transformador del acto creativo.
